Lo primero que hago en las mañanas, después de encender la cafetera, es asomarme al espejo, quien siempre me ha de decir: - Hey!! que fortuna la tuya, otra vez juntas.
En la mayoría de las veces, y particularmente nosotras, las féminas, buscamos al asomarnos en ellos, un “vas bien chica”, o un “mira! esto hay que cambiarlo pronto”…. Pero son solo estos espejos los que debemos cuidar?? O a los que debemos observar??.
También nosotros mismos, solemos ser espejos para muchas personas: nuestros hijos, nuestros compañeros de clase o de trabajo, nuestros alumnos, nuestros hermanos menores, etc; pues a través de la relación estrecha que podamos cultivar, nos ganamos la admiración de ellos y logramos ser modelo a seguir para muchos de sus proyectos e ideales. Quizás parte del dicho, dime con quien andas y te diré quien eres, tiene mucho que ver con esto. Creo que todos en algún momento de nuestra vida, observamos a alguien como muy especial o importante y nos planteamos un modelo de vida similar, pues nos vemos retratados en esos mismos pies.
Cuando es uno el que se está mirando en ese espejo, debe observar de manera muy crítica para tomar solo lo bueno y moldearlo a nuestro propio estilo o conveniencia. Dicen que nadie aprende por experiencia ajena, que somos expertos en aprender por dolor o a trancazos. Pero esto es relativamente cierto, pues en el ensayo de mezclar lo que me gusta de mi espejo y lo que yo quiero hacer podemos cometer errores, y como en un laboratorio de química, debemos revisar nuevamente las cantidades y los tiempos y volver a intentarlo.
Existen otros espejos muy importantes, que son los que van colocados a ambos lados de nuestro auto, éstos, mientras conducimos, …nos permiten ver lo que va justo detrás de nosotros e incluso a los lados posteriores… y nos ayuda a reunir todos los elementos necesarios para hacer un viraje sin provocar accidentes, o simplemente para mantener el rumbo sin perder de vista todo el panorama.
Estos espejos, si lo comparamos con la vida mía, yo diría que se parecen al feedback. La posibilidad de la retroalimentación es el catalizador perfecto que necesitamos para lograr los cambios importantes que debemos considerar para retomar el rumbo correcto o para asegurar que vamos por donde queremos y cómo queremos ir.
Y usted utiliza todos sus espejos disponibles??, confía en lo que allí se refleja??
En la mayoría de las veces, y particularmente nosotras, las féminas, buscamos al asomarnos en ellos, un “vas bien chica”, o un “mira! esto hay que cambiarlo pronto”…. Pero son solo estos espejos los que debemos cuidar?? O a los que debemos observar??.
También nosotros mismos, solemos ser espejos para muchas personas: nuestros hijos, nuestros compañeros de clase o de trabajo, nuestros alumnos, nuestros hermanos menores, etc; pues a través de la relación estrecha que podamos cultivar, nos ganamos la admiración de ellos y logramos ser modelo a seguir para muchos de sus proyectos e ideales. Quizás parte del dicho, dime con quien andas y te diré quien eres, tiene mucho que ver con esto. Creo que todos en algún momento de nuestra vida, observamos a alguien como muy especial o importante y nos planteamos un modelo de vida similar, pues nos vemos retratados en esos mismos pies.
Cuando es uno el que se está mirando en ese espejo, debe observar de manera muy crítica para tomar solo lo bueno y moldearlo a nuestro propio estilo o conveniencia. Dicen que nadie aprende por experiencia ajena, que somos expertos en aprender por dolor o a trancazos. Pero esto es relativamente cierto, pues en el ensayo de mezclar lo que me gusta de mi espejo y lo que yo quiero hacer podemos cometer errores, y como en un laboratorio de química, debemos revisar nuevamente las cantidades y los tiempos y volver a intentarlo.
Existen otros espejos muy importantes, que son los que van colocados a ambos lados de nuestro auto, éstos, mientras conducimos, …nos permiten ver lo que va justo detrás de nosotros e incluso a los lados posteriores… y nos ayuda a reunir todos los elementos necesarios para hacer un viraje sin provocar accidentes, o simplemente para mantener el rumbo sin perder de vista todo el panorama.
Estos espejos, si lo comparamos con la vida mía, yo diría que se parecen al feedback. La posibilidad de la retroalimentación es el catalizador perfecto que necesitamos para lograr los cambios importantes que debemos considerar para retomar el rumbo correcto o para asegurar que vamos por donde queremos y cómo queremos ir.
Y usted utiliza todos sus espejos disponibles??, confía en lo que allí se refleja??
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